Queridos amigos de este, vuestro blog, al que ultimamente le presto menos atención de la que merece...
Me imagino que habréis tenido noticias de los últimos acontecimientos acaecidos en Barcelona a raíz de la "desocupación" por parte de los Mossos de Esquadra de un grupo de okupas en un local, antigua sucursal bancaria, en el barrio de Gràcia.
La pregunta que hago en el título de este artículo viene a cuento porque a estos sujetos el anterior alcalde de Barcelona le pagaba al dueño del solar 65.000€ al año para que los "ninis" que allí habitaban, no liaran la traca.
Ahora, la nueva alcaldesa, Ana Colau, en principio se negó a pagar dichos emolumentos al dueño del local... todo sea por ahorrar, lo que llevó al desalojo y posterior guerrilla entre los okupas y los Mossos durante varios días. Tras estos altercados, la Colau se planteó comprar el local al dueño y dárselo a los violentos, pero al ascender el precio a unos 500.000€ la alcaldesa lo desestimó.
Pero vamos a ver... en qué país vivimos cuando un grupúsculo de 40 ó 50 personas (por llamarles algo) pone en jaque a toda una ciudad como Barcelona?
¿Cómo es posible que una edil se plantee tamaño chantaje?
¿Cómo es posible que los Mossos se dejen amedrentar por estas parias sociales porque la alcaldesa les diga que sean comedidos en sus actuaciones?
Yo solamente sé una cosa... Si yo no puedo pagar mi hipoteca y vienen a desahuciarme y me pongo chulo con el agente judicial o con la policía... me dan de palos hasta en el velo del paladar, a mí, a mi mujer y a mis hijos... me quedo sin casa, sin dignidad, molido a palos y debiendo lo que me queda de deuda.
Llego a la conclusión de que el mundo va al revés cuando los que nos gobiernan se dejan amedrentar por alguien que no está ni quiere integrarse una sociedad de provecho y se despreocupan por la ciudadanía preocupada por la libertad, el orden y bienestar social o que al menos, eso pretende.
Un saludo.
Javier Martín